Hoy en día disponemos de combinaciones específicas de vidrios antirruido que incorporados al doble vidrio permiten obtener una atenuación acústica de entre 28 y 41 dB (decibelios) del ruido del exterior.

No obstante hay que tener en cuenta diversos factores a la hora de optimizar las prestaciones de cualquier tipo de cerramiento con la incorporación de aislantes del ruido.

La calidad de materiales en muros, suelos, techos, persianas, así como la colocación por parte de profesionales y los acabados de obra (salida de la cinta de las persianas, rejillas de ventilación así como sellado final) son, sin duda, factores que influyen a la hora de obtener un buen aislamiento acústico.

El ruido en los hogares es sinónimo de desequilibrio, contribuyendo directamente con enfermedades y trastornos de múltiples tipologías. Las ventanas son el elemento por donde el ruido suele acceder a nuestros hogares. Ventanas poco estancas y de baja calidad nos hacen pagar un alto precio. A la hora de elegir unas ventanas de calidad debemos evaluar la necesidad de aislamiento acústico de nuestra vivienda y asegurarnos de adquirir una ventana que cumpla con el nivel de aislamiento adecuado.

¿QUE FACTORES AFECTAN A UN BUEN AISLAMIENTO ACÚSTICO?

1- Material: No todos los materiales se comportan de igual modo ante las ondas acústicas.

2- Forma de apertura: La forma de apertura es determinante a la hora de garantizar el mayor aislamiento acústico. Siempre que se pueda elegir, se aconseja utilizar sistemas de apertura practicables, que son los que garantizan un sellado estanco de la ventana. Atenuando el ruido y las pérdidas de energía.

3- Permeabilidad de la ventana: Un cierre estanco y el sellado de los diferentes elementos, garantiza una óptima permeabilidad y en consecuencia, se mejora el aislamiento acústico.

4- Vidrio: El vidrio es determinante para un buen aislamiento acústico. Se aconseja utilizar vidrios laminados con tratamiento acústico a base de Butiral Acústico (PVB).

¿QUÉ NECESITA? AISLAMIENTO ACÚSTICO

CAMBIO DE VENTANAS. CUESTIÓN DE SALUD

La contaminación acústica está cada día más presente en nuestras vidas. Como si de una plaga se tratase, este sonido no deseado nos acompaña durante todo el día y toda la noche, día tras día, semana tras semana, año tras año. Sin darnos cuenta que éste es el causante de grandes males para nuestra salud así como nuestro bienestar.

Todos somos responsables, de algún modo, de generar esta molestia, ya sea en el modo de desplazarnos (transporte a motor), en nuestro tiempo de ocio, o trabajando.

El principal causante del ruido que nos rodea es el tráfico. Éste representa el 80% de la exposición al ruido. El segundo causante del ruido es la industria en un 10% los ferrocarriles en un 6% y las actividades de ocio en un 4% .

Nuestros oídos no tienen párpados, como nuestros ojos. No los podemos cerrar. Y debido a ello debemos soportar una exposición constante a diferentes fuentes de ruido, algunas de ellas muy nocivas para nuestra salud.

Según la OMS, marca unos exigentes niveles de ruido durante el sueño menores de 30dBA equivalentes en 8h.

¿CÓMO PUEDE EL RUIDO AFECTAR A NUESTRA SALUD?

Son diferentes los factores fisiológicos y también los personales que influyen en la afectación del ruido en cada uno de nosotros. Pero podemos decir que el ruido es una causa de no dormir bien, rendir menos y peor, de sufrir molestias durante el sueño y que éste no sea de calidad.

El ruido también puede dañar nuestros corazones, ya que diversos estudios han demostrado una asociación entre el ruido ambiental y enfermedades isquémicas cardiacas e hipertensión. Recientemente, estudios realizados por el Instituto epidemiología del cáncer de Copenhague señalan la posible influencia del ruido en los infartos cerebrales.

A nivel de salud mental, el ruido puede generar ansiedad, estrés, nerviosismo e irritabilidad, náuseas, dolor de cabeza, inestabilidad emocional, tendencia a la discusión, impotencia sexual, cambios de humor, incremento en conflictos sociales,neurosis, histeria y psicosis.

LA LUCHA CONTRA EL RUIDO

Las soluciones al problema de la contaminación acústica son múltiples, sin embargo todas ellas son complejas y costosas: instrumentos legales, soluciones técnicas y tecnológicas para emitir menor ruido, educación y sensibilización ciudadana.

Seamos realistas. Hasta que estas soluciones no se lleven a cabo, pueden pasar años. Mientras tanto, nuestra salud sigue expuesta a esta agresión de forma diaria.

EL PRIMER PASO PARA PALIAR EL RUIDO

Precisamente por esto, un primer paso que podemos empezar a hacer para paliar este problema es instalar sistemas de cerramientos (ventanas y puertas) con un aislamiento acústico adecuado para interior de la vivienda.

Con ello ganaremos un ambiente libre de ruido para nuestras horas de ocio y sueño (que no son pocas). Ganaremos en calidad de vida.